No ha sido casualidad la amplia y decisiva presencia de la mujer en el más reciente proceso de reforma constitucional en Cuba, concluido con la aprobación de la nueva Carta Magna que fue proclamada este 10 de abril, cuando se cumplen 150 años de la Constitución de Guáimaro, la primera de la República en Armas.
El activo rol de las féminas cubanas comenzó desde la redacción del anteproyecto de Constitución. Fueron 13 las que, junto a otros 20 diputados encabezados por el General de Ejército Raúl Castro Ruz, integraron la Comisión Parlamentaria encargada de elaborar y presentar el texto que luego sería sometido a consulta popular y, posteriormente, a referendo.
Precisamente en esa etapa del proceso de debate se escuchó la voz femenina, enriqueciendo cada uno de los análisis del proyecto que, tras ser modificado en más del 60 por ciento de su contenido, se convirtió en la letra definitiva de la Ley Suprema del país.